La familia carmelita, hemos disfrutado de un fin de semana de formación, compartiendo el Carisma Carmelita y la sencillez Evangélica de Madre Elisea. Hemos vivido un fin de semana en el que ha quedado reflejado que el Carisma y la Sencillez de Nuestra Madre Fundadora siguen vivos y latentes a día de hoy.
Ha sido muy gratificante comprobar, como a día de hoy, nuestra Familia Carmelita hace vivos los deseos de Madre Elisea adaptándolos a la sociedad de hoy, trabajando en misión compartida para una Iglesia Sinodal.